El asma premenstrual está mal caracterizada, y aunque puede darse en todos los niveles de gravedad de asma, se asocia a menudo al asma grave y mal controlada. Su prevalencia real se desconoce debido a la ausencia de criterios diagnósticos unánimes, si bien se considera que hasta un 40% de las mujeres asmáticas en edad reproductiva la padecen en mayor o menor medida. Las últimas investigaciones describen el asma premenstrual como una forma de asma muy sintomática y con predisposición a las exacerbaciones, y que se asocia con cierta frecuencia a la intolerancia al ácido acetilsalicílico. En cualquier caso, queda mucho por saber acerca de su etiopatogenia y futuros tratamientos.
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